El flamante AIROH KOMBAKT irrumpe en el mercado como una propuesta audaz para el motociclista citadino. Este casco jet, concebido con la perfecta amalgama de ligereza, funcionalidad y un distintivo estilo contemporáneo, se posiciona como el aliado indispensable para los trayectos diarios. Su diseño ha sido meticulosamente pensado para adaptarse a las exigencias de la vida urbana, sin sacrificar ni un ápice de seguridad o confort, marcando un nuevo estándar en la protección para el día a día sobre dos ruedas.
El innovador casco AIROH KOMBAKT, presentado oficialmente el 25 de junio de 2025, es la respuesta de la marca italiana a las necesidades del motociclista moderno. Este modelo, diseñado con un enfoque en la agilidad y la protección, ha sido meticulosamente fabricado con termoplástico HRT, garantizando una resistencia óptima. Su característica más destacada es la versatilidad de su visera, que, gracias a un kit de personalización incluido, permite al usuario transformar su apariencia de un estilo aventurero a una estética más depurada y urbana. Además, la integración de una pantalla solar se presenta como un elemento crucial, ofreciendo una visión clara y protección contra el resplandor, mejorando significativamente la experiencia de conducción en diversas condiciones de luz. El peso ligero del casco, que parte de los 1.150 gramos, y su disponibilidad en dos tamaños de calota (XS-M y L-XXL) aseguran un ajuste preciso y cómodo para una amplia gama de usuarios. En el ámbito de la seguridad, el KOMBAKT no escatima en innovaciones, incorporando el sistema AIROH Sliding Net (ASN) para una disipación de energía superior en caso de impacto. El interior, completamente extraíble, lavable e hipoalergénico, junto con un sistema de ventilación avanzado que incluye entradas de aire frontales, superiores y laterales, garantiza una frescura constante, incluso en los meses más cálidos. Complementando estas características, el casco cuenta con un práctico cierre micrométrico y preinstalación para los sistemas de comunicación AWC 2 y AWC 4 de AIROH, así como un ingenioso anillo antirrobo. Disponible a un precio de 129,99 euros (PVPR con IVA incluido), el AIROH KOMBAKT no solo promete seguridad y confort, sino que también ofrece una gama de colores vibrantes para aquellos que buscan un accesorio que refleje su personalidad.
Desde la perspectiva de un observador entusiasta, el lanzamiento del AIROH KOMBAKT es un hito significativo en la evolución de los equipos para motociclistas urbanos. Refleja una comprensión profunda de las necesidades contemporáneas: la búsqueda de una movilidad ágil y protegida, sin renunciar al distintivo estilo personal. La inclusión de características como la visera desmontable y la pantalla solar integrada subraya un compromiso con la adaptabilidad y el confort del usuario, elementos cada vez más valorados en la rutina diaria. Este casco no es solo un equipo de protección; es una declaración de intenciones por parte de AIROH, demostrando que es posible fusionar la innovación tecnológica con un diseño atractivo, ofreciendo una solución integral que eleva la experiencia de conducción en la ciudad a un nuevo nivel de seguridad y satisfacción.
La empresa Yoshimura, fundada por el célebre Hideo 'Pops' Yoshimura, figura como un pilar fundamental en el ámbito global de la optimización de motores. Ante el avance inexorable de la propulsión eléctrica en la industria de las dos ruedas, Fujio Yoshimura, heredero y sucesor en la dirección, ha reiterado el compromiso inquebrantable de la compañía con la producción de componentes de excelencia. La meta primordial permanece inalterada: superar las expectativas de los aficionados y profesionales del motociclismo, adaptándose a los desafíos del futuro sin perder la esencia de su legado.
Hideo 'Pops' Yoshimura, una figura legendaria con un sombrero distintivo, dejó una huella imborrable en la historia de la mecánica de motocicletas. Su dedicación al trabajo y su visión lo llevaron de Japón a conquistar el mercado estadounidense. Fujio Yoshimura, nacido en 1948, acompañó a su padre en esta audaz travesía americana desde 1971, consolidando la presencia de Yoshimura como la principal compañía de preparación de motores a nivel mundial. Tras años de liderazgo, en 2024, Fujio cedió la presidencia a Yohei Kato, asumiendo ahora un rol de asesor, pero manteniendo viva la filosofía que ha guiado a la empresa por décadas.
Fujio Yoshimura compartió sus recuerdos de infancia, marcados por el ambiente del taller de su padre en un Japón de posguerra. En aquellos tiempos, los soldados estadounidenses, ávidos de mejoras para sus motocicletas, eran clientes asiduos, y su entusiasmo por el trabajo de 'Pops' les auguraba un futuro exitoso en América. Fue en Estados Unidos donde Fujio comprendió el vasto potencial de su negocio, al notar la escasez de expertos capaces de ensamblar correctamente las piezas de alto rendimiento que ya circulaban en el mercado. Esta observación aguda fue clave para el crecimiento exponencial de Yoshimura.
Un hito crucial en la expansión de Yoshimura fue el récord mundial de velocidad logrado en Daytona por una Kawasaki Z1 preparada por la firma, lo que catapultó la demanda de sus productos en el continente americano, requiriendo el traslado de personal desde Japón para satisfacerla. Fujio se quedó en Estados Unidos, donde su ingenio lo llevó a adquirir una computadora HP y a sumergirse en la programación para desarrollar un software pionero en el diseño de árboles de levas, facilitando su producción en serie. En 1983, regresó a Japón y, tras el deterioro de la salud de su padre en 1985, asumió las riendas de la empresa de manera orgánica y natural.
En el panorama actual, a pesar de que la electrificación en Europa parece haber disminuido su ritmo, el destino de los motores de combustión interna sigue siendo incierto. No obstante, Fujio Yoshimura es categórico en la determinación de su empresa de continuar innovando en componentes para motores refrigerados por aire y aceite, e incluso de incursionar en el ámbito de las motocicletas eléctricas si la evolución del mercado así lo requiere. Para Yoshimura, la competición es el motor de la evolución, y esta seguirá siendo su premisa, independientemente de la tecnología subyacente.
La visión de 'Pops' Yoshimura, aunque desprovista de un plan de negocios formal, se cimentó en la honestidad y la respuesta a las necesidades de sus clientes. Fujio ha adoptado una filosofía de 'triple victoria', buscando que tanto el vendedor, como el comprador y la sociedad en su conjunto obtengan beneficios. Esta visión integral asegura que Yoshimura siga forjando productos que no solo satisfagan, sino que superen las expectativas de su distinguida clientela, perpetuando un legado de excelencia y adaptabilidad en la industria de la motocicleta.
La reciente jornada del Campeonato Mundial de Motocross en Matterley Basin, Gran Bretaña, dejó un sabor agridulce para la delegación española. A pesar de mostrar un rendimiento prometedor y la capacidad de todos sus integrantes para superar las fases de clasificación, la fortuna no estuvo del lado de los pilotos nacionales. Fallos técnicos inesperados en las motocicletas y arranques desfavorables en las mangas de carrera comprometieron las aspiraciones de obtener resultados más destacados. Esta situación subraya la imprevisibilidad del motocross, donde no solo la habilidad del piloto, sino también la fiabilidad mecánica, son cruciales para el éxito en la competición de élite.
La 12ª parada del Mundial de Motocross tuvo lugar en el exigente trazado de Matterley Basin. En esta cita, las categorías EMX250 y EMX125 del Campeonato Europeo también estuvieron presentes, brindando una oportunidad a los jóvenes talentos españoles. Todos los representantes de nuestro país lograron asegurar su puesto en las mangas principales, un indicio claro de su nivel competitivo y preparación. No obstante, los imprevistos técnicos se convirtieron en un obstáculo formidable para sus ambiciones.
En la categoría EMX125, Samuel Tapia y Enzo Badenas experimentaron un progreso notable a lo largo de las mangas, a pesar de enfrentarse a arranques desfavorables. Sus posiciones iniciales, a menudo en la parte trasera del pelotón, los obligaron a realizar remontadas impresionantes. Esta capacidad para recuperar terreno y luchar por posiciones intermedias es un testimonio de su determinación y el avance en su rendimiento en una categoría conocida por su alta competitividad.
La EMX250 fue particularmente desafortunada para el equipo. Adrià Monné, quien había mostrado una notable progresión a lo largo de la temporada, consiguió una excelente salida, posicionándose entre los diez primeros e incluso ascendiendo hasta la séptima plaza. Sin embargo, un inconveniente mecánico, específicamente la desconexión del manguito de la bomba de combustible, lo forzó a retirarse prematuramente. Salvador Pérez, por su parte, también tuvo un buen inicio junto a su compañero de equipo, rodando en novena posición. No obstante, la pérdida de su asiento a mitad de carrera afectó su ritmo y lo obligó igualmente a abandonar. El domingo, ambos pilotos demostraron una gran capacidad de superación al remontar posiciones significativas, con Monné finalizando 14º y Pérez 21º, pese a partir desde atrás debido a salidas comprometidas.
A pesar de los contratiempos, el fin de semana también trajo motivos de celebración. Francisco García, exintegrante del equipo nacional, dominó la categoría EMX250 con una doble victoria, subiendo a lo más alto del podio. En las categorías principales, los pilotos españoles también ofrecieron actuaciones destacadas. Rubén Fernández consiguió un quinto puesto y un impresionante segundo lugar en MXGP, mientras que en MX2, David Braceras, Oriol Oliver y Guillem Farrés lucharon por el podio. Oliver logró un tercer puesto en la primera carrera, y Farrés obtuvo una quinta posición en la segunda manga, demostrando el buen momento del motocross español en la escena internacional.
La experiencia en Matterley Basin resalta la esencia del motocross: una combinación de talento individual, preparación física rigurosa y, crucialmente, una máquina en perfecto estado. Los fallos mecánicos son una faceta ineludible del deporte motor, pero la resiliencia y el espíritu combativo exhibidos por los pilotos españoles, tanto los que enfrentaron problemas como los que brillaron, son un claro indicador de su compromiso y potencial en el ámbito global del motocross. El apoyo continuo y la adaptación a estos desafíos serán fundamentales para futuras competiciones.